Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
Efesios 2:10
Nuestros Pastores
Los pastores José R. "Cheo" y Alba C. Manzano, de origen puertorriqueño, entregaron su vida a Cristo en el 1998 y posteriormente se unieron en matrimonio. De esta unión, procrearon dos hermosas hijas, Janely y Ariana, quienes también están activas en el ministerio.
Preparándose para el ministerio del Señor, cursaron estudios profesionales de Teología en la Universidad Cristiana Mizpa (MCU por sus siglas en inglés). Su capacitación ministerial se fue forjando a través de los años participando activamente en ministerios como pastores de jóvenes y evangelistas en la congregación La Casa de Alfarero, M.B. y la Iglesia de Dios Pentecostal, M.I., Church Avenue.
Respondiendo al llamado pastoral, la iglesia Taller de Reconciliación, Inc. ofició su primer servicio el 27 de marzo de 2016. Desde ese momento, nuestra encomienda es de predicar las buenas nuevas del evangelio de Jesucristo y llevar esperanza a las comunidades de habla hispana que residen en nuestra área.
Nuestra Identidad
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Somos una iglesia Cristo céntrica, orientada hacia las personas y sensible a sus necesidades en todos sus programas y ministerios.
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Nos guiamos en fe y dirección por las Sagradas Escrituras (Biblia).
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Una comunidad con hambre de Cristo, que experimenta la presencia de Dios y se maravilla de su santidad a medida que conforma las vidas de los creyentes a la imagen de Cristo.
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Amamos a todas las personas y nos oponemos a cualquier acción o política discriminatorias en contra de cualquier grupo o individuo.
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Identificar y desarrollar a las personas que Dios ha llamado al liderato y desafiarlos a ser siervos y siervas.
Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
Deuteronomio 6:5
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Misión
Visión
Ser una iglesia comprometida a visualizar las necesidades espirituales y materiales existentes de la comunidad. Esforzarnos en impactar a la sociedad por palabra y ejemplo para desarrollar discípulos; bautizándolos y enseñándoles todas las cosas que Jesucristo dejó establecidas en su Palabra.